Hoy en el mundo, la competencia
en el mercado laboral es muy grande y crece día a día. Lo sabemos todos! Pero
no está claro cómo realmente manejarlo ni qué hacer y menos aun cuando uno
recién sale de las aulas de Universidades o Instituciones académicas.
Se sufre un shock! Una especie
de shock hipotérmico, del cual no todos salen con éxito. Ocasiona depresión,
frustración y una pérdida de rumbo muchas veces.
Me he preguntado en muchas
ocasiones, por qué nadie estaba haciendo
algo al respecto, tomando las riendas del asunto. Me di cuenta que no era
simple y que era mejor y sobre todo más fácil no tocar el tema y dejarlo
madurar, quizás para que otra generación se haga cargo.
Por qué tendría que hacerlo
otra generación si lo podemos empezar ahora mismo?
No hay más tiempo que esperar y
este es el momento en el cual tomar las riendas de este asunto y hacer algo. Hay
que cambiar la forma de ver la vida, de ver el mundo de generar las
oportunidades y de crecer y evolucionar siendo quien uno es y enseñándoles a
quienes vienen detrás cuales son y cómo encontrar las herramientas que
necesitan para tener más luz en el camino.
Esto es lo que les permitirá
caminar el sendero que cada uno vino a recorrer para vivir mejor su vida y a su
vez dejar una estela, un legado y una marca indeleble en la historia, a quienes
vienen por detrás.
Otros lo hicieron antes que
nosotros, ahora es nuestro turno! Pues de esto trata el verdadero sentido de la
vida de todos y cada uno de nosotros hoy!
Para ello, hay que estar
dispuesto a ponerle “manos a la obra” para dar el “primer paso” que nos permite
empezar a vivir nuestra vida mejor, acorde a los nuevos lineamientos del mundo
en el que nos tocó vivirla.
El mundo cambió y seguirá
cambiando sobre todo por el advenimiento de la nueva tecnología que nos captura
a todos de una u otra manera, aunque capture a unos más que a otros. Nadie se
escapa de este virus!
Ya no es posible tapar el sol
con un dedo o pensar que la situación se va a revertir. Esto es un absurdo y lo
que se debe hacer es caminar hacia adelante, capacitarse y formarse en lo que
no tenemos para que la inserción en el mercado de hoy sea exitosa, y que lo que hemos invertido en nuestra
formación haya valido la pena.
Nada fue nunca ni será perfecto
y el cambio es continuo y lo seguirá siendo, simplemente que hoy la velocidad
de cambio, es más rápida que ayer o quizás los medios y la nueva tecnología son
responsables de que así lo percibamos.
Asique aunque la educación
tenga sus bemoles, aunque haya tenido deficiencias, en este momento por estarse
viviendo una época de revolución, transición y cambio a todos los niveles,
inclusive los del pensamiento, valores y conceptos básicos de la propia
existencia humana, es importante volver esto consciente para poder en lugar de
ser críticos, y pensar que “antes fue mejor que ahora”, poder usarlo siendo creativos
y visualizar nuevos caminos, para no quedarse estancados.
No puede haber habido para cada
uno de nosotros una vida más interesante y un reto más valedero que este que
nos toca vivir.
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